Calas de Mallorca; descúbrelas, vívelas, siéntelas…
Mallorca tiene 555 Km de costa en donde hay más de 250 calas y playas
A lo largo de la misma podemos encontrar centenares de calas y playas de todos los tamaños: desde extensos arenales de varios kilómetros de longitud hasta recónditas calas de apenas unos metros de anchura. La costa de Mallorca puede proporcionar la experiencia que busque cualquier visitante.
Varios complejos turísticos han crecido en diferentes puntos de la costa
Proporcionando a los turistas todas las comodidades posibles en cuanto a seguridad, confort, oferta de ocio… Pero también es posible encontrar a pocos kilómetros playas recónditas y solitarias, prácticamente desconocidas, donde disfrutar de la tranquilidad.
Lo que es común a todas ellas es el disfrute de las aguas habitualmente tranquilas del Mediterráneo
Y de un clima apacible con muchos días de sol al año. Ese sol que combinado con el mar de Mallorca crea una luz única en el mundo y que durante décadas ha atraído a pintores de todo el mundo para tratar de capturarla.

Sus aguas, navegadas desde la más remota antigüedad, aún albergan secretos por descubrir
Cientos, sino miles, de barcos terminaron en el fondo de estas aguas, víctimas de tormentas o de piratas, antes de alcanzar el refugio que proporcionan los muchos puertos naturales repartidos por toda la costa de Mallorca.
Fenicios, griegos, cartagineses, romanos, vándalos, bizantinos, árabes, cristianos, otomanos…
Durante siglos las costas de Mallorca fueron punto de parada y comercio para todas las civilizaciones del Mediterráneo. Y también campo de batalla. Piratas que establecieron aquí sus bases. Piratas que atacaban los pueblos costeros en busca de botín y esclavos. Imperios de Europa, Asia y África que desembarcaron en calas y playas de todo el litoral de Mallorca en sus luchas de poder. Toda la costa de Mallorca está salpicada de momentos históricos, muchos de los cuales han dejado vestigios que también podremos visitar.
Playas y calas llenas de historia, de encanto…
Para relajarse o para divertirse; para practicar deporte o para tumbarse tranquilamente bajo el magnífico sol de Mallorca. Todo eso y mucho más podrás conocer en Mallorqueando, pero lo importante es que lo descubras y experimentes por ti mismo. ¿Mallorqueamos?
Calas y playas de la zona norte

Playa de Sant Joan

Son Serra de Marina

Son Bauló

Playa de Muro

Aucanada

Playa de Alcudia

Cala Carbó

Cala Molins

Cala Clara

Cala Barques

Cala Figuera (Formentor)

Cala Murta

Cala Formentor

Can Picafort
El norte de Mallorca está dividido en dos grandes zonas que comparten características comunes: las bahías de Alcudia y de Pollensa.
Ambas están expuestas a la tramontana y esto ha creado playas de pendientes suaves y poco profundas. En la bahía de Alcudia se encadenan más de 15 Km de arenales, incluyendo algunas de las playas más bellas de Mallorca. También podemos encontrar pequeñas calas en los cabos que cierran ambas bahías.
En esa zona podemos encontrar algunos de los núcleos turísticos más importantes de Mallorca
Puerto de Pollensa, Puerto de Alcudia, Playa de Muro y Can Picafort. En estas localidades podemos encontrar tanto bulliciosas zonas turísticas con locales de ocio, restaurantes y tiendas, como lugares apartados y discretos donde disfrutar tranquilamente del mar y el sol.

También podremos realizar un recorrido por el pasado de Mallorca
Desde la prehistoria, con la gran necrópolis de Son Real; el periodo romano, visitando las ruinas de la gran ciudad de Pollentia; o la época medieval y renacentista, recorriendo el centro histórico de Alcudia; por mencionar sólo tres ejemplos destacados de los muchos que podemos encontrar en estas tierras.
Y no podemos olvidar el patrimonio natural
En Alcudia tenemos la Albufera de Mallorca, el mayor humedal de la isla, punto de parada de aves migratorias entre Europa y África, aparte de alojar especies autóctonas. En Pollensa está su hermana pequeña, la Albufereta. Y más al norte la magnífica península de Formentor, un paraje natural de singular belleza que capturó a visitantes de todo el mundo antes de la invención del turismo.
Calas y playas del Levante

Cala Mendia

Cala Romántica

Cala Varques

Cala Bona

Playa de Porto Cristo

Cala Murta (Porto Cristo)

Cala Anguila

Cala Sequer

Cala Antena

Cala Bota

Cala Agulla

Cala Mitjana (Artá)

Cala Mesquida

Cala Torta
El este de Mallorca está dominado por la Sierra de Levante
En su parte parte más septentrional destaca el Macizo de Artá, que surge abruptamente del mar, dando lugar así a calas pequeñas flanqueadas por acantilados. Hacia el sur el relieve es más suave y es donde tenemos algunas playas de arena.
Aunque estas tierras fueron pobladas desde la prehistoria, no se desarrollaron grandes núcleos habitados hasta tiempos muy recientes
De hecho pequeños puertos de pescadores pasaron a ser grandes núcleos turísticos hace apenas 50 años: Cala Ratjada y Cala Millor serían los más destacados en el norte. Hacia el sur tendríamos Porto Cristo, Cala Romántica y Calas de Mallorca. Prácticamente pequeñas ciudades hoteleras con todo tipo de instalaciones y servicios para hacer más confortable la estancia de los turistas.

Pero entre estos grandes centros de vacaciones también hay pequeñas calas lejos del bullicio
Medio ocultas entre pinares, donde disfrutar de grandes momentos de relax. Los amantes de la naturaleza no pueden dejar de visitar el Parque Natural de la Península de Levante. Sus más de 1.400 Ha incluyen varios hábitats típicos del Mediterráneo con fauna y flora muy características. Junto al Parque hay una Reserva Natural que acoge varias calas vírgenes.
Hay otras dos joyas naturales que no podemos perdernos
Una son las majestuosas Cuevas de Artá: el fruto de miles de años de, normalmente, silencioso trabajo de la naturaleza moldeando caprichosas formas en este subsuelo calizo. Y la otra, las Cuevas del Drach, un espectacular conjunto de cuevas parcialmente sumergidas y que cuenta con uno de los mayores lagos subterráneos de Europa.

El levante de Mallorca ofrece experiencias para todo tipo de viajeros
Desde el que busca el ocio y la diversión hasta el que persigue la tranquilidad, o el que busca descubrir las huellas de nuestros antepasados. Entre pequeñas calas, colinas rematadas por castillos y santuarios y pequeños pueblos recién sacados de la Edad Media la comarca del levante mallorquín es de visita obligada.
Calas y playas de es Migjorn

Caló des Moro

Cala s’Almunia

Cala Pi

Cala Marmols

Cala Llombards

Cala Santanyí

Cala Beltrán

Cala Mitjana (Felanitx)

Cala s’Amarador

Es Trenc

Playa de Cala d’Or

Cala Ferrera

Cala Sa Nau

Cala Serena

Cala Gran

Cala Esmeralda

Cala Estreta (Felanitx)

Cala Egos

Cala Brafi
La comarca del sur de Mallorca nos proporciona una gran variedad de paisajes
La zona más al sudeste la constituyen costas agrestes con pequeños acantilados donde se abren sinuosas calas. En el extremo sur, en Santanyí y Ses Salines, el relieve es mucho más suave, y a partir de aquí encontramos principalmente grandes arenales como Es Trenc, Sa Ràpita y Cala Pi, entre los que se alternan recónditas calas, formadas sobre todo por desembocaduras de torrentes.
A lo largo de su costa han florecido algunos importantes núcleos turísticos
Cala d’Or en un extremo y el Arenal de Llucmajor en el otro. Entre medias hay multitud de pequeños pueblos de pescadores que han ido incluyendo mucha oferta turística. Portocolom, Portopetro o la Colonia de Sant Jordi serían algunos de los más destacados.

Pobladas desde la prehistoria estas tierras han conocido todos los avatares de la turbulenta historia de Mallorca
Diseminados aquí y allá podremos descubrir yacimientos de sus pobladores primitivos. En estas costas desembarcaron los conquistadores romanos, y también los árabes; en Llucmajor se libró la última batalla del Reino de Mallorca; por la actual Cala d’Or llegaron las tropas borbónicas para poner fin a la Guerra de Sucesión. Todos estos hechos han dejado huella en esta zona en la arquitectura de sus pueblos y ciudades, los santuarios, fortines y torres de defensa.
Pero no podemos olvidar la naturaleza
En el sudeste se encuentra el Parque Natural de Mondragó: más de 700 Ha de pinos, matorrales y cultivos de secano que han modelado el paisaje durante siglos. Aquí se pueden conocer decenas de especies autóctonas y de aves migratorias, pero también conocer los usos agrarios tradicionales.

Salvo un par de núcleos muy conocidos y las playas más populares en general el sur de Mallorca es un gran desconocido que merece ser descubierto
El entorno natural, los pueblos, tanto de costa como de interior, las fiestas, mercados y tradiciones… hay muchos motivos para aventurarse en esta parte de Mallorca.
Calas y playas de la Bahía de Palma
La bahía de Palma es sin duda el principal centro turístico de Mallorca
La propia Palma incluye los grandes arenales de Can Pastilla y s’Arenal (agrupados junto a Cala Estancia bajo el nombre de Playa de Palma), pero además tiene un buen número de otras playas de menor tamaño pero igualmente perfectas para el baño de mar y de sol. Además de las playas de Palma hay que añadir por un extremo de la bahía el Arenal de Llucmajor y varias pequeñas calas de arena y roca. Y por el otro, algunas de las más conocidas playas de Calviá como Palmanova y Magaluf.

La mayoría de estas playas fueron urbanizadas en los años 60 (en el primer boom turístico), o en los 70
Dada la cercanía al aeropuerto y la gran planta hotelera que se construyó en Palma y las zonas limítrofes, toda la bahía se convirtió en un destino turístico de primera categoría a nivel mundial. El precio fue el deterioro del entorno natural en varias zonas, y que algunas playas tuviesen que regenerarse artificialmente. En la actualidad, aunque no puede revertirse la urbanización, se han tomado medidas para garantizar que tanto las playas como sus aguas sean de la mejor calidad para su máximo disfrute.
Pero la bahía de Palma no es sólo sol y playa
A lo largo de todo el litoral hay una ingente oferta de ocio de todo tipo: deportes náuticos, excursiones marítimas por el litoral, restaurantes, bares, discotecas, centros comerciales… y a pocos minutos tenemos el centro de Palma, con sus centros comerciales, zonas de ocio, barrios de tiendas de artesanía…

Para los amantes de la cultura una ciudad bimilenaria como Palma, fundada por los romanos sobre anteriores asentamientos primitivos, es una auténtica joya
Construida un nivel sobre otro es posible reconocer en su callejero los distintos niveles de la ciudad: la romana, la árabe, la cristiana, la renacentista, y la moderna. Cada periodo ha dejado su legado: los baños árabes, el palacio de la Almudaina, la Catedral de Mallorca y multitud de iglesias, el castillo de Bellver, la lonja… por no hablar de los cientos de edificios singulares y casas señoriales repartidas aquí y allá.

La bahía de Palma es un destino turístico de primera categoría a nivel mundial
Capaz de satisfacer las expectativas de prácticamente cualquier visitante.
Calas y playas de la zona suroeste

Cala Llamp

Playa de El Toro

Santa Ponsa

Cala en Cranc

Cala Fornells

Cala Marmassen

Sant Elm

Camp de Mar
El suroeste de Mallorca es un resumen en pequeño de lo que es toda la isla
En ese extremo occidental podemos encontrar grandes arenales, calas recónditas y vírgenes, pueblos de interior con sus tierras agrícolas, núcleos turísticos costeros y pueblos de montaña. Y apenas en 10 Km a la redonda.

Esta zona incluye básicamente parte de Calviá y Andratx
Aquí está el extremo sur de la Sierra de Tramuntana, con alguna elevación notable como el Puig de Galatzó. A partir del Cabo de Cala Figuera, que cierra por el oeste la bahía de Palma, la costa se vuelve más abrupta y aparecen muchas pequeñas calas, aunque también hay notables playas de arena como Santa Ponsa y Camp de Mar.

Como en otras zonas de Mallorca y de todo el Mediterráneo los principales pueblos se construyeron tierra adentro para protegerse de los piratas
Pero bien entrado el siglo XX, desaparecida esa amenaza, tomaron fuerza los núcleos costeros. El relieve y la vegetación constituyen un entorno perfecto para gozar de cierta intimidad, y no pocos famosos y millonarios establecieron aquí sus residencias. Esto atrajo un turismo de lujo al que se dio respuesta con instalaciones de primer nivel, como Puerto de Andratx o Port Adriano.
Al mismo tiempo siguen coexistiendo pequeños pueblos de pescadores como Sant Elm
Y también hay lugar para disfrutar de la naturaleza. Precisamente frente a este pueblo se halla la isla de la Dragonera, convertida en parque natural. Al norte está la reserva natural de la Trapa: un antiguo monasterio trapense donde descubrir el entorno natural de esta parte de la costa de Mallorca y ejemplos de la arquitectura tradicional.
Calas y playas de la Sierra de Tramuntana

Playa d’en Repic

Cala Deià

Cala Estellencs

Cala Banyalbufar

Sa Calobra

Caló de s’Estaca

Torrent de Pareis

Cala Tuent
La Sierra de Tramuntana es la principal sierra de Mallorca y recorre toda su costa noroeste
Su elevación (hasta 1436 m en el Puig Major) protege el Pla de Mallorca de la tramontana, un viento frío y turbulento procedente del norte que sopla frecuentemente en los meses de invierno. Este viento ha modelado durante milenios la vertiente marítima de la Sierra, tanto desde el punto de vista geológico como biológico.

La Sierra de Tramuntana es una joya paisajística que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2011
No sólo por sus paisajes naturales sino también por los creados por el hombre a lo largo de los siglos: cultivos en terrazas, distribución de agua, edificaciones de piedra que se funden con el entorno…
Habitada desde hace milenios, en las faldas de las montañas de la Sierra de Tramuntana podemos encontrar algunos de los pueblos más pintorescos de Mallorca
Deià, Valldemossa, Fornalutx… por mencionar sólo unos pocos, de fama mundial por su entorno y por el impresionante paisaje en el que están enclavados.
Las montañas y valles son un paraíso para los aficionados al senderismo, con un gran número de rutas de diversas dificultades pero todas de gran atractivo. Los aficionados a deportes más extremos como el barranquismo o la espeleología también encontrarán aquí un buen número de reclamos, como el imponente barranco de Sa Fosca o la cueva llamada Sa Campana.
Algunos de estos barrancos y torrentes desembocan en calas de gran encanto donde disfrutar de las aguas del Mediterráneo en un entorno incomparable. El más famoso sin duda es el Torrent de Pareis y su desembocadura, Sa Calobra.
